La Plataforma de Trabajadores de Costa Ballena se constituye para la defensa de sus empleos y para denunciar a los nuevos responsables de la EUC por actuar manifiestamente en contra de los intereses de los propietarios y llevar a la Entidad a un deterioro premeditado e irreversible a corto plazo.
Se excusan en el hecho de que el Consejo Rector ha elaborado un programa de trabajo, programa del que algunos miembros del Consejo Rector no tienen noticia de su existencia, y el cual desconoce tambien la totalidad de la plantilla (Gerente, Jefes de Departamentos y operarios).
Y todo ello, con dos finalidades: La primera es, culpar al Ayuntamiento de Rota y hacerle responsable del cada día peor mantenimiento de la urbanización Costa Ballena, responsabilidad de la EUC por sus estatutos. La segunda es tratar de crear intencionadamente las condiciones de un despido de trabajadores, para lo cual los nuevos responsables de la EUC cuentan con el irregular asesoramiento - por no estar aprobado por el Consejo Rector de la Entidad- de un nuevo gabinete de asesoramiento, el cual mediante una sospechosa “auditoría de gestión” pretende hacer ver que sobran trabajadores y empleados en la urbanización.
Para ello, y para que dicha auditoría sea creíble, el propio presidente de la Entidad, le ha estado negando a los trabajadores el uso de los vehículos para los desplazamientos (la urbanización tiene 4 kms. de largo), les dificulta podar los árboles o reparar baches y acerados, aduciendo que estas labores son competencia del Ayuntamiento de Rota.
Paradójicamente, en los últimos 5 años los propietarios de Costa Ballena han aprobado presupuestos con un incremento de tasas de 0 €. Sin embargo, Costa Ballena ha sido un referente y un modelo de gestión eficaz en los servicios, consiguiendo un entorno del mayor prestigio en todo el litoral de Cádiz.
La Plataforma de Trabajadores de Costa Ballena se manifiesta en contra de estas prácticas, impuestas por el nuevo presidente, que llevarán a un deterioro irreversible a la urbanización, con el consiguiente quebranto económico –tanto de forma directa como en el valor de sus patrimonios- para propietarios, comerciantes, hoteleros, profesionales y comuneros en general, que cambiarán su lugar de residencia, pasando de unos de los lugares de excelencia turística en Andalucía a una urbanización dominguera con ratas, cucarachas y mosquitos.
En vista de los últimos acontecimientos, referir que la idea del Consejo Rector es la de subcontratar todos los trabajos a empresas externas, de hecho ya se están solicitando presupuesto a varias, ofreciéndoles los medios con los que cuenta esta Entidad (barredoras, vehículos, herramientas…). La plataforma expresa que de ninguna de las maneras posibles estas empresas podrán realizar el mismo trabajo con la misma calidad al mismo costo, por una simple razón, porque como es lógico todas las empresas tienen una finalidad común, que no es otra que un beneficio industrial, hecho de lo que la estructura actual de la E.U.C está exento, ya que no tiene ánimo de lucro.
Y la pregunta es: ¿Es eso lo que los propietarios de Costa Ballena quieren para su complejo?
